INTRODUCCIÓN
El sector del vino ha experimentado una gran evolución en las últimas décadas, girando su atención hacia prácticas más respetuosas con el medio ambiente. En estas circunstancias, los vinos biodinámicos han irrumpido en el panorama internacional, ofreciendo una alternativa sostenible y de alta calidad para los amantes del vino.
En un mundo cada vez más consciente de la necesidad de cuidar nuestro planeta, la industria vitivinícola no se ha quedado atrás. Ha surgido una nueva tendencia que combina la tradición vinícola con un gran respeto por la naturaleza: los vinos biodinámicos. Este tipo de vinos, producidos bajo principios ecológicos y holísticos, están aumentando su popularidad y reconocimiento en todo el mundo, ofreciendo a los amantes del vino una opción sostenible y de alta calidad.
¿EN QUÉ SE DIFERENCIAN LOS VINOS BIODINÁMICOS DEL RESTO?
Los vinos biodinámicos se diferencian de otros tipos de vino en varios aspectos. En primer lugar, los productores de vinos biodinámicos deben seguir un calendario lunar y planetario para realizar las tareas del viñedo, como la poda y la cosecha. Además, deben utilizar preparados biodinámicos, una serie de sustancias naturales que se aplican al viñedo para mejorar la fertilidad del suelo y la salud de las vides.
Por otro lado, la vinificación biodinámica también tiene sus particularidades. Los vinos biodinámicos no pueden contener aditivos químicos, y sólo se permite un uso muy limitado de sulfitos. Además, la fermentación debe realizarse con levaduras autóctonas, es decir, las que están presentes de forma natural en la uva.
Como comprender el fenómeno de los vinos naturales según: https://www.oiv.int/es/comprender-el-fenomeno-de-los-vinos-naturales
¿CÓMO SE ELABORAN LOS VINOS BIODINÁMICOS?
Para elaborar vino biodinámico se han de seguir los principios de la agricultura biodinámica, un sistema agrícola desarrollado por el filósofo austríaco Rudolf Steiner en la década de 1920. Esta práctica está basada en el principio de que la granja o viñedo es un organismo autosuficiente que debe contar con un equilibrio ecológico para poder prosperar.
El proceso de elaboración de los vinos biodinámicos empieza en el viñedo. Los productores biodinámicos consideran que un suelo sano y equilibrado es esencial para obtener uvas de calidad. Por ello, aplican preparados biodinámicos al suelo para mejorar su estructura y fomentar la actividad biológica.
Hay varias operaciones agrícolas que han de hacerse teniendo en cuenta el calendario lunar y planetario, como son: la poda, el deshoje y la cosecha, una práctica que, según los productores biodinámicos, influye en la calidad del vino. Una vez cosechadas, las uvas se fermentan con levaduras autóctonas, lo que ayuda a expresar el “terroir” del viñedo en el propio vino.
En bodega, se aplica el mínimo intervencionismo posible en los vinos. No se utilizan aditivos químicos y sólo se permite un uso muy limitado de sulfitos. El objetivo final que se persigue en este tipo de vinos, es que el vino refleje de la manera más auténtica posible el carácter de la uva y del lugar de donde proviene.
VENTAJAS DE LOS VINOS BIODINÁMICOS PARA LAS BODEGAS Y PARA LOS CONSUMIDORES
Para los productores, la agricultura biodinámica puede mejorar la salud y la productividad del viñedo a largo plazo, ya que fomenta la diversidad biológica y la fertilidad del suelo.
Para el consumidor, los vinos biodinámicos son una opción sostenible y saludable. Al no contener aditivos químicos, son más naturales y pueden ser mejor tolerados por personas sensibles a ciertas sustancias. Además, muchos aficionados al vino consideran que los vinos biodinámicos tienen una personalidad única y expresan de forma más auténtica el “terroir” del que proceden.
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